Estudiantes y egresadas de FVET reducen la mortalidad ovina en una experiencia innovadora en la Patagonia.
Durante un mes,
un equipo integrado por nueve estudiantes y egresadas de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de la República (Udelar) trabaja en la
estancia Luz Aurora, en San Gregorio (Magallanes, Chile). Gracias a su labor,
cada año se salvan más de 1.200 corderos y se reduce significativamente la mortalidad ovina, en una experiencia que el
Instituto de Desarrollo Agropecuario (INDAP) de Chile busca replicar entre pequeños productores de la región.
El grupo participa de
una pasantía intensiva en el marco de un
convenio entre la Facultad de Veterinaria y el productor Jorge Cañón, propietario del predio. Desde principios de octubre,
las jóvenes realizan guardias de 24 horas para asistir partos, alimentar corderos huérfanos y recuperar ovejas con dificultades de movilidad, en un modelo de manejo reproductivo que se asemeja a una
«Unidad de Cuidados Intensivos ovina».
«Es el tercer año que las estudiantes uruguayas participan. Son jóvenes muy comprometidas: trabajan en turnos de 12 horas, con frío, viento y partos a toda hora. Lo hacen con vocación y cariño», destacó Jorge Cañón.
La iniciativa surgió como respuesta a un problema estructural en la ganadería ovina de la región: las altas pérdidas de crías en partos múltiples. En Magallanes, se estima que cada año mueren cerca de 300 mil corderos por falta de manejo intensivo durante las primeras horas de vida. En Luz Aurora, en cambio, el sistema ha permitido reducir drásticamente la mortalidad y aumentar la rentabilidad.
«El costo del operativo equivale al valor de unas 300 ovejas, pero el beneficio supera las 1.200 crías recuperadas. El balance es positivo en todos los sentidos», explicó Rubén Caro, encargado del establecimiento.
Raúl Lira, técnico del área de Producción Animal de INIA Kampenaike, señaló que el modelo «demuestra que se puede mejorar la productividad y el bienestar animal con un manejo cuidadoso y replicable a pequeña escala«.
La visita de autoridades y productores locales, encabezada por el director regional de INDAP, Gabriel Zegers Müller, permitió conocer de cerca el trabajo de las uruguayas y evaluar su potencial de aplicación en otros predios. «Este sistema combina ciencia, experiencia y compromiso con el bienestar animal. Es una lección de innovación para la ganadería familiar campesina», sostuvo Zegers Müller.
Entre las protagonistas de esta experiencia se encuentra Felipa, una cordera que nació débil y sin fuerzas, pero que logró caminar tras varios días de cuidados intensivos por parte del equipo uruguayo. Su historia simboliza el espíritu de este proyecto: la unión entre conocimiento, dedicación y empatía.
En el galpón de Luz Aurora, mientras nuevas camadas buscan el calor de sus madres, las estudiantes y egresadas de la Facultad de Veterinaria continúan su labor con una convicción clara: cada vida cuenta.
Fuente: Cristián Morales C.
Periodista INDAP Magallanes, Chile.